«El cumpleaños secreto» de Kate Morton. Por Victoria Santisteban.

El cumpleaños secreto de Kate Morton ha sido una novela fácil de leer. A raíz del fallecimiento de la madre de la protagonista de la historia, se desencadenan una suerte de acontecimientos que revelan  los secretos escondidos de una familia perfecta a través de continuos flashbacks. El pasado descubre el presente.

 Un relato que se construye en cada capítulo, con idilios y desamores. Un oscuro pasado que se remonta a la segunda guerra mundial, viene a ser heredado por la siguiente generación. Cada uno de los personajes tiene especial relevancia. Un joven muy enamorado cuyo padre está sumido en una enfermedad que le hace revivir el pasado una y otra vez. Una joven dispuesta a comerse el mundo que forma una familia tras sucederse una serie de hechos traumáticos. Y su mejor amiga, un personaje misterioso. Un suceso luctuoso transforma las vidas de los actores y es la protagonista la que se encarga de investigar en la distancia temporal el pasado de su madre, que tiene que reconstruir para poder comprender.

Una historia muy bien estructurada y relatada de forma elegante. Unos personajes que no dejan indiferente por sus giros. Un claro mensaje que nos traslada la verdad del pasado de nuestros progenitores. ¿Idealizamos demasiado a nuestros padres?, ¿los juzgamos?

Siempre digo y lo repito hasta la saciedad, si es necesario, que no existe un mal libro. Todos tienen derecho a existir, a ser escritos y a ser leídos (bueno hay alguna excepción, pero puntual). Este en concreto es de los que considero como puente o intermedio hacia otro o entre otros. Es una lectura recomendable, ya que toda lectura enseña y aporta información, pero no en la que tengamos que implicar un alto grado de concentración.

Kate Morton es una excelente escritora, no tengo duda al respecto. Y seguramente me reafirmaré en esto continuando con su obra.

  • Fotos extraídas de google books y del blog quelibroleo.com.

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Publicado por

Victoria Santisteban

Siendo lectora tardía, cuyo interés más intenso llegó en madurez, he de confesar que me falta tiempo material, como a todo hijo de buen vecino, pero ya no tiene nada que ver con el tiempo pasado. En realidad, las cosas como son, lo hago cuando me apetece de verdad, porque de otro modo, no se disfruta. Gracias a todo lo que he vivido, sobre todo, gracias a mi madre, que devoraba todo libro que llegaba a sus manos, y a sus momentos con Corín Tellado, aquí, en mi sitio, hago aquello que me gusta: escribir sobre cosas que leo. Aunque ya, en el albor de la tercera edad o cuarta (yo ya no sé cómo va esto) me he decantado por reflejar mis historias. A bien que lo llevo haciendo desde que era muy pequeña, es el momento. De todas formas, leer es sano, nos hace cuestionar las cosas que suceden a nuestro alrededor, nos hace más felices, mejores personas y con una mayor capacidad de compresión del mundo. Así que leamos. Esquelas, cómics, periódicos, etc., la cosa es hacerlo. Como, también, habrán observado, estas entradas de creación propia tampoco es que tengan un nivel digno de la RAE, pero igual para un ratico, que decía aquel... Nota: Tengan paciencia. Mi ritmo es lento, abarco varios campos y este es uno de ellos. Pero, es el que más me gusta, no lo duden. La curiosidad mueve el mundo, déjense llevar...

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