Amor platónico
Blanco de las iras
salí buscando oscuridad.
No era de día,
tampoco de noche.
En un lugar apartado,
intuyendo la soledad,
me quedé vencida.
Fue una sombra
la lujuria desatada
en la silueta de un joven
lo que me despertó.
Me dejé llevar absorta
en pensamientos libidinosos.
Y el agua nos arrastró
llevados por el calor.
Él era hermoso
yo joven y apasionada.
Ardimos en combustión
como si llegara el fin de la pasión.
No existía nada alrededor.
No vivía la vida.
No moría lo muerto.
Y, sin embargo, fue el ímpetu
lo que avivó el ardor.
Aquel verano sentí morir
porque todo fue un sueño
que no debió ocurrir.
Todo quedó en el frenesí
de una mente calenturienta
que trató de conseguir
el amor platónico y altruista
de alguien que nunca me vio venir.
Antonio se llamaba él
un chico malo que en un arrebato
destruyó todo atisbo de amor.
Y una falla nos separó
un verano, que nunca sucedió.
- Imagen extraída de https://historia-arte.com.
Publicado por
Victoria Santisteban
Siendo lectora tardía, cuyo interés más intenso llegó en madurez, he de confesar que me falta tiempo material, como a todo hijo de buen vecino, pero ya no tiene nada que ver con el tiempo pasado. En realidad, las cosas como son, lo hago cuando me apetece de verdad, porque de otro modo, no se disfruta.
Gracias a todo lo que he vivido, sobre todo, gracias a mi madre, que devoraba todo libro que llegaba a sus manos, y a sus momentos con Corín Tellado, aquí, en mi sitio, hago aquello que me gusta: escribir sobre cosas que leo. Aunque ya, en el albor de la tercera edad o cuarta (yo ya no sé cómo va esto) me he decantado por reflejar mis historias. A bien que lo llevo haciendo desde que era muy pequeña, es el momento.
De todas formas, leer es sano, nos hace cuestionar las cosas que suceden a nuestro alrededor, nos hace más felices, mejores personas y con una mayor capacidad de compresión del mundo. Así que leamos. Esquelas, cómics, periódicos, etc., la cosa es hacerlo.
Como, también, habrán observado, estas entradas de creación propia tampoco es que tengan un nivel digno de la RAE, pero igual para un ratico, que decía aquel...
Nota: Tengan paciencia. Mi ritmo es lento, abarco varios campos y este es uno de ellos. Pero, es el que más me gusta, no lo duden.
La curiosidad mueve el mundo, déjense llevar...
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